Bandeja que viene con el horno
No hay nada mejor que la repostería casera: el olor que se respira en la cocina y que emana del horno, la expectación de esperar a que se enfríen los productos antes de probarlos y el sabor del producto final. Aunque no hay nada mejor que hornear en casa, no hay nada que lo arruine más que encontrar las delicias pegadas a la base de la bandeja del horno, lo que lleva a raspar, raspar y, finalmente, tener que despegar el horneado en trozos. Por eso es fundamental forrar la bandeja del horno y aquí te mostramos cómo hacerlo, en sencillos pasos. Engrasar la bandeja de horno es un paso muy rápido, pero es un paso clave que garantizará el éxito de su horneado.
Para hornear panes, existen moldes especiales para panes. A veces puede ser un poco más difícil sacar los productos horneados de ellos, por lo que puedes considerar el uso de papel para hornear (ver las instrucciones más abajo para más detalles).
Hoy en día, muchos de estos moldes son antiadherentes. No obstante, le sugerimos que siga engrasando la bandeja, ya que no arruinará el horneado pero evitará que se pegue. Sí, incluso las bandejas antiadherentes se pegan a veces, sobre todo si la bandeja es antigua y está muy usada.
Tipos de rejillas para hornos
Una bandeja para asar es un elemento básico en muchas cocinas. Es muy práctica para asar un pavo y resulta útil para cocinar asados de ternera o cerdo, así como un pollo entero. Su diseño especial cocina estos grandes trozos de carne de manera uniforme mientras atrapa los jugos debajo. No te estreses si no tienes una sartén para asar porque probablemente tengas un sustituto en tu cocina que te servirá.
Una sartén para asar es una sartén grande apta para el horno con una rejilla que cabe dentro. Suele estar hecha de acero inoxidable o aluminio grueso y puede soportar el peso de aves enteras y asados grandes. La rejilla mantiene la carne alejada del fondo de la sartén, lo que favorece la circulación del aire para una cocción uniforme. La sartén que hay debajo tiene una doble función: recoge los goteos de la carne y ofrece un espacio para asar las verduras.
Si asas carne con frecuencia, tener una sartén para asar tiene mucho sentido. No son especialmente caras y se pueden encontrar de segunda mano. Sin embargo, una sartén dedicada a asar lo suficientemente grande para un pavo puede ocupar más espacio de almacenamiento de lo que vale para cualquiera que rara vez cocine grandes cenas de carne. Si te encuentras en este último grupo, crea una sartén y una rejilla improvisadas con cosas que ya tengas en la cocina.
Posición de la rejilla del horno para asar
Ya sea para hornear, asar o asar a la parrilla, el lugar en el que coloque sus esfuerzos culinarios en el horno influirá en la forma en que se cocinen. Esto puede marcar la diferencia entre una corteza dorada y escamosa y un fondo empapado. Esta guía le mostrará algunos de los principios de uso de las rejillas del horno.
La mayoría de los hornos eléctricos convencionales tienen una fuente de calor en la parte superior y otra en la inferior. Al encender el horno, ambas fuentes calientan la cavidad hasta alcanzar las temperaturas establecidas. Una vez alcanzada ésta, la fuente de calor inferior se activará de forma intermitente para mantener el calor. Esto significa que la parte superior del horno estará más caliente, porque esa fuente de calor está constantemente produciendo calor y porque el aire caliente sube.
Parece obvio, ¿verdad? Puedes aprovechar las diferentes rejillas para conseguir diferentes cosas durante el proceso de cocción. Por ejemplo, puede empezar a cocinar una tarta en la rejilla inferior para que se dore la parte inferior, y luego pasarla a la rejilla central durante la mayor parte del tiempo de cocción para que el relleno se cocine de manera uniforme. Por último, puede ponerla en la rejilla superior durante los últimos 15 minutos aproximadamente para conseguir una corteza dorada y escamosa.
Labio de la rejilla del horno, delante o detrás
Forrar una bandeja de horno significa cubrir el interior con papel de horno antiadherente. Esto evita que los alimentos se peguen al interior de la bandeja. El papel para hornear es la mejor manera de evitar que los pasteles se peguen sin utilizar un exceso de aceite. Hay que seguir unos pasos sencillos para que el papel quede perfectamente.
Hay unos sencillos pasos para forrar con éxito una bandeja de horno. Estos pasos ayudarán a que tus pasteles, galletas y pasteles de carne no se peguen a la bandeja. El primer paso es elegir el forro que desea utilizar, encontrar la bandeja del tamaño adecuado y recortar las esquinas.
Elija el revestimiento que desea utilizar para su bandeja de horno. El papel de pergamino es la opción perfecta y puede ser blanqueado o sin blanquear. Yo me he decantado por el papel pergamino sin blanquear, que tiene un color marrón natural pero sigue siendo antiadherente y resistente al calor.
Elige una bandeja limpia y del tamaño adecuado para lo que vayas a cocinar. Si cocinas con frecuencia, sabrás que las bandejas pueden acabar a veces con trozos de masa de pastel o queso que se quedan pegados.