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Brindando con cerveza

Toast Ale: La historia de convertir el pan sobrante en cerveza

Notas de sabor: Estamos muy contentos de compartir esta fermentación espontánea afrutada, brillantemente ácida, como la de Belini. La combinación de melocotones maduros recién recogidos con el cálido sabor a nuez que aportan los huesos de los melocotones se une al suave roble francés y a los sabores residuales de la barrica de las uvas de vino blanco con sabor a cítricos. El aroma se caracteriza por los croissants de almendra recién horneados y un melocotonero en flor, equilibrado con la cantidad justa de funk de la casa. Estamos entusiasmados por la forma en que estos aromas frutales locales juegan con nuestra cerveza base espontánea ácida y roble de una manera que nos recuerda a estar sentados en una enorme bodega de piedra bebiendo vinos blancos crujientes en California. ¡Brindemos por las Leyendas!

Beer Kulture lanza la Fundación Sparks: El programa, que lleva el nombre del difunto D. “Sparks” Massenburg, se inspira en su vida y en su dedicación a superar las adversidades de su pasado para crear una vida digna de la promesa del mañana. Se lanza en respuesta a las barreras sistémicas y estructurales a las que se enfrenta la comunidad negra, concretamente los hombres y niños negros.

Elaborar una cerveza con pan – TOAST ALE

Cuenta la leyenda que los monjes, para mitigar el hambre que les invadía durante esas largas semanas, y siguiendo la norma del Papa Pío V (“Liquidum non frangit jejunum”, los líquidos no violan el ayuno), preparaban cervezas primaverales con bastante cuerpo… ¡de ahí las cervezas de Pascua!

Los orígenes son bastante imprecisos, porque es difícil establecer con certeza dónde y cuándo se produjeron por primera vez. Lo que sí es cierto es que la mayor producción y consumo de estas cervezas se concentra en la península escandinava, con recetas que varían de un país a otro.

Cuenta la leyenda que, debido a un incendio en la fábrica de cerveza de la ciudad, que se extendió y quemó gran parte de la misma, el maestro cervecero, en su intento desesperado por no perderlo todo, decidió fabricar la cerveza de todas formas utilizando la cebada quemada, y el resultado fue un enorme éxito.

Son cervezas sin filtrar, de color ámbar y naturalmente turbias. El aroma ahumado es muy fuerte en la nariz, mientras que en la boca es más evidente el sabor a hierba. En el resto de Alemania también existen versiones sin humo, llamadas Osterbier.

Brindando con cervezas artesanales en todo el país

Es lógico que si las etiquetas de las comidas cambian en todo el mundo, también lo hagan las de los brindis. Por ejemplo, en algunos países se considera de mala educación chocar las copas antes de beber. En otros, el último en llenar su copa es la persona elegida para pagar la siguiente ronda de bebidas.

Sin embargo, no debes dejar que la etiqueta para beber te asuste a la hora de pedir una jarra de cerveza en un país extranjero. En lugar de eso, mira este divertido vídeo un par de veces y asimila (en un juego de palabras) las diferentes formas de brindar.

El vídeo ha sido elaborado por la buena gente de Let’s Grab a Beer. Let’s Grab a Beer es una comunidad que se ha reunido para celebrar todo lo relacionado con la cerveza, desde su historia hasta sus diferentes tipos de elaboración, pasando por el maridaje de la cerveza y la forma correcta de beberla. En resumen, saben de lo que hablan. Así que, sin más preámbulos, vea el vídeo y levante una copa. O no lo hagas, todo depende de dónde te encuentres.

Cómo brindar por el mundo

Sí, este es un blog de cerveza, no de bebida.    De hecho, el lema es “deja de beber cerveza y empieza a degustarla”, pero ni siquiera yo puedo negar que ‘cerveza’ y ‘beber’ están al menos vagamente asociados.    Por eso, reconozco que cuando se habla de las costumbres de beber del mundo, no necesariamente estamos hablando sólo de cerveza (aunque en mi mente, sí).

“Augenkontakt” es una palabra alemana que se traduce como “contacto visual”, y a veces se puede escuchar en presencia de hablantes de alemán justo en el momento en que se levantan las copas para brindar.    Sin embargo, para la mayoría de los angloparlantes, “eye contact” no es precisamente un término que evoque sentimientos de miedo y temblor… al menos no todavía.    Pero siga leyendo, porque todo eso está a punto de cambiar.

Por cierto, ¿has oído alguna vez a alguien decir que “hay cosas que no se pueden desaprender”?    Suelen decirlo después de haber descubierto algo que desearían no haber descubierto, algo así como ese ominoso momento de la película de terror psicológico de 2002 “The Ring”, en el que justo después de que la protagonista vea las inquietantes imágenes de “la cinta de vídeo maldita”, suena un teléfono y se oye la voz de una chica al otro lado susurrando esas dos inquietantes e ineludibles palabras, “siete días…”, insistiendo en la cantidad de tiempo que le queda a la protagonista antes de encontrar su espantoso final.

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