Ensalada de lentejas
Me encantan las lentejas negras desde el punto de vista culinario porque son oscuras y densas y son perfectas para esas recetas que requieren ese color oscuro intenso. Son discretas en cuanto a su sabor y apenas imparten su cremosidad, cuando se hacen puré. Me encantan las lentejas en general porque, desde el punto de vista nutricional, son realmente excepcionales (lo digo literalmente: haga clic aquí para saber más sobre los beneficios para la salud de las lentejas). Son bajas en calorías; son una excelente fuente de proteínas vegetales de alta calidad; una excelente fuente de fibra; ricas en minerales, como el calcio, el potasio y el magnesio, y una buena fuente de vitaminas del grupo B, especialmente de folato. He dedicado dos blogs íntegramente a las lentejas para que sepas cuánto y por qué me encantan: Un ingrediente clandestino; Las bondades de las lentejas.
Estas son algunas de las recetas en las que las encontrarás: Creme au Chocolat, Pastel de lava de chocolate, Batido de avena y almendras con cacao, Pastel de chocolate negro sin harina, Pudín de chocolate sedoso o todas mis hamburguesas, ya sean de pavo o veganas (tengo tantas, que tengo un blog dedicado a mis hamburguesas aquí).
Remojar las lentejas
No te conformes con una sopa de lentejas insípida. Hazla bien y tendrás a todo el mundo pidiendo segundos…. y terceros… Esta receta de lentejas es uno de los mejores platos nutritivos y sencillos que puedes hacer con lentejas secas y que es 100% delicioso. Utiliza lentejas verdes, rojas, marrones o una mezcla de sopa de lentejas.
Todo lo que se necesita es un toque de especias, hojas de laurel y un toque de limón para elevar esta sopa. Es una receta fácil que ofrece unos resultados magníficos, una de las favoritas de los lectores con cientos de comentarios.
¿Pero sabes qué? Una receta de sopa de lentejas bien hecha no puede dejar de comerse. Volverás a repetirla y a repetirla, y luego te llevarás grandes cubos de sopa al trabajo para almorzar y volverás a comerla con gusto.
Si te preguntas si la sopa de lentejas es buena para ti, la respuesta es sí. Las lentejas son nutritivas, ricas en minerales, proteínas, bajas en grasas y ricas en fibra (salud digestiva). Son una estupenda fuente vegetariana de proteínas, ya que el 25% de las calorías de las lentejas son atribuibles a las proteínas.
Lentejas secas deutsch
Las lentejas son una fuente de energía. Están cargadas de proteínas, magnesio, vitamina B, zinc y potasio, lo que las convierte en un alimento perfecto. ¡Saber cómo cocinarlas correctamente es una habilidad que puedes aprender rápida y fácilmente!
Las lentejas son una legumbre llena de proteínas y hierro que las convierte en un gran sustituto de la carne. Son súper versátiles y se pueden utilizar de muchas maneras. Añadirlas a tu dieta es una forma perfecta de aportar nutrientes a tu cuerpo y ayudar a combatir cosas como las enfermedades del corazón.
Las lentejas tienen muchos beneficios increíbles. Son un alimento barato y muy saludable para el corazón y deberían formar parte de la dieta de todos. Estos son algunos de los principales nutrientes que nos aportan las lentejas:
¡No! Las lentejas no necesitan ser remojadas antes de ser cocinadas porque son muy pequeñas y se cocinan bastante rápido en comparación con otras judías. Sin embargo, puedes ponerlas en remojo si quieres reducir aún más el tiempo de cocción o si eres sensible a la hora de digerir las legumbres.
El otro problema de no remojar las alubias secas es la digestión. La mayoría de las alubias pueden ser más difíciles de digerir si no se remojan. Esto se debe a que las alubias contienen ciertos azúcares, llamados alfa-galactósidos, que pueden provocar gases. Forman parte de un grupo de carbohidratos llamados FODMAPS.
Cómo cocinar las lentejas rojas
Cocer lentejas es tan fácil como recordar el 1:2. Por cada taza de lentejas secas, se necesitan dos tazas de líquido de cocción. Después, sólo hay que cocer a fuego lento hasta que estén tiernas. Poner un temporizador y controlar las lentejas será importante porque las lentejas pueden ponerse blandas rápidamente y ¡no hay nada peor que eso! Aquí está el desglose, para que puedas evitar la papilla a toda costa.
Pon las lentejas en una olla mediana y cúbrelas con 2 tazas de agua (o caldo de pollo para ganar puntos) y añade una pizca de sal. Llévalo a ebullición a fuego medio-alto. Una vez hirviendo, reducir el fuego a bajo y tapar.
Cuela el exceso de líquido y condimenta las lentejas como quieras. A mí me gustan con más sal, pimienta y un buen aceite de oliva, pero una combinación más atrevida de comino y pimentón también es deliciosa. ¿Qué lentejas debo usar? ¡Esto depende de lo que busques! Si quieres unas lentejas que mantengan su forma y no se conviertan en papilla, entonces lo que buscas es una lenteja verde o marrón. Éstas mantienen bien su forma y son la variedad más común en las tiendas de comestibles estadounidenses. Hay que saber que tanto las lentejas marrones como las verdes varían de color y cualquiera de ellas puede ir del verde claro al marrón oscuro e incluso casi negro. Es confuso, lo sé. Las lentejas rojas o amarillas no mantienen su forma tan bien y son más adecuadas para sopas o en el dal indio.