Cómo utilizar el quemador de fondue
Dulce o salada, la fondue es un plato interactivo que requiere que los comensales jueguen con su comida. Los tenedores de mango largo, cargados con un trozo de fruta o verdura fresca, pan o carne, se sumergen en queso, chocolate o aceite caliente. Lo único complicado de utilizar una olla de fondue es regular la temperatura.
Las ollas de fondue eléctricas tienen la ventaja de poder controlar la temperatura del aceite o la salsa. Si el contenido de la olla se calienta demasiado, basta con bajar el fuego. Si está demasiado frío, súbelo. Aprenderás a medir la temperatura a medida que utilices la olla. Si el aceite humea o la salsa hierve con demasiada fuerza, es que está demasiado caliente. Por el contrario, si los alimentos no se cocinan o el queso se congela, está demasiado frío.
Las ollas de llama abierta son más fieles a sus orígenes en las fiestas de fondue de los años 60, pero regular la temperatura es un poco más complicado. La mayoría de las ollas de fondue de llama abierta se calientan con Sterno o un combustible de gel similar, y el recipiente para el combustible en la base de la olla tiene una tapa que se desliza hacia atrás y hacia adelante. Si el contenido de la olla se calienta en exceso, puedes cerrar la tapa por completo o utilizarla para bloquear parte de la llama, reduciendo la temperatura.
Fondue de queso
La fondue es un método de cocina divertido para servir una comida para un grupo pequeño. Se puede utilizar para cocinar carne o marisco, o para preparar diferentes tipos de salsas para mojar casi cualquier tipo de alimento. El tipo de salsa para mojar fondue que se utilice dependerá de lo que se vaya a mojar. La fondue puede servirse como aperitivo, plato principal o postre. Hay muchas recetas de fondue para todos los platos que se quieran servir.
Una olla de metal para fondue se utiliza para las fondues que requieren mucho calor al cocinar, específicamente la carne y el marisco. Estas ollas también son adecuadas para las fondues de carne y queso siempre que la fuente de calor se regule a una temperatura más baja.
Prepare y caliente primero la fondue en el fogón y luego pásela a la olla para fondue. El queso rallado se funde fácilmente. Deje que el queso se derrita lentamente. El alcohol, como el vino, el champán o la cerveza, que se añade a la fondue de queso realza el sabor y evita que se cuaje. Si la fondue empieza a separarse o a cuajar, añada un poco de zumo de limón recién exprimido. Remueva constantemente con una cuchara de madera hasta que la mezcla quede suave. Para ajustar el espesor, añada vino o sidra de manzana en lugar de agua. Remueva siempre la fondue de queso con un movimiento en forma de ocho para favorecer la mezcla de los ingredientes.
Cómo hacer una fondue de chocolate
La fondue es un plato caliente de queso que se originó en Suiza en el siglo XVIII. Se elabora fundiendo al menos dos variedades diferentes de queso en una olla, con vino y un poco de harina. Esta mezcla de quesos suele servirse en una olla común, llamada calquelón.
Si se utiliza el sterno u otra fuente de calor de llama abierta, se recomienda cocinar la fondue de queso en los fogones y luego transferirla a una olla de fondue colocada sobre una unidad de calentamiento en la mesa. De este modo, la fondue se mantendrá a una temperatura uniforme sin sobrecocinarse. Las versiones eléctricas son otra opción, y suelen calentar más uniformemente.
La mayoría de las recetas de fondue consisten en una combinación de dos quesos, el Gruyere y el Emmenthaler, también conocido como queso suizo. La mezcla de estos dos quesos, junto con la adición de vino, hace que la experiencia de sabor sea muy atractiva.
Como en cualquier comida comunitaria, hay que seguir unas normas básicas de etiqueta. Cada persona utilizará su tenedor de fondue para pinchar su comida antes de sumergirla en la olla. Sumerja suavemente el tenedor en el queso para cubrir su comida, dejando que el exceso de queso gotee de nuevo en la olla y no en la mesa.
Fiesta de la fondue en Youtube
Una fondue es un acontecimiento social agradable y aporta algo de variedad a las cenas. Sin embargo, utilizar el combustible equivocado puede tener consecuencias desagradables. Afortunadamente, existen muchos productos en el mercado para alimentar una fondue, cada uno de ellos adaptado específicamente a la temperatura y al tipo de llama que requiere la fondue, de modo que se evitan los percances.
Para las fondues de chocolate, caramelo, café y otros postres, la clave es mantener el líquido lo suficientemente caliente como para evitar que se solidifique. Para ello, el mejor combustible es una simple vela de té sin aroma. Quemarlas a unos cinco o seis centímetros del fondo de la sartén o del plato de fusión para mantener la temperatura en el nivel óptimo. Se mantendrán encendidas durante 4 o 5 horas y no presentan ninguno de los peligros asociados a los combustibles líquidos.
Para las fondues de queso, carne o marisco, se necesita un combustible que arda a una temperatura más alta que la que se puede alcanzar con las candelitas. El alcohol líquido es un buen combustible para las fondues, ya que arde prácticamente sin olor y no deja manchas de hollín en la parte inferior de la sartén. Se puede adquirir en la mayoría de las tiendas de alimentación y farmacias, y se puede utilizar para lámparas y para la limpieza, además de como combustible para la fondue. Necesitará un quemador de fondue especial para utilizar el combustible de alcohol. Debes tener especial cuidado de no derramar el combustible líquido, especialmente cerca de las llamas.