Cómo aumentar el apetito en los ancianos de forma natural
La nutrición desempeña un papel fundamental en el apoyo a la salud, la capacidad funcional y la calidad de vida de las personas mayores. Un buen estado nutricional favorece las posibilidades de una persona mayor de vivir en casa y acelera la recuperación de las enfermedades.
A medida que se envejece, el consumo de energía se reduce porque se puede ser menos activo y la masa muscular disminuye. A menudo, esto también tiende a reducir la cantidad de alimentos que ingiere, y su consumo de proteínas, vitaminas y minerales puede no ser el adecuado.
Como el apetito de una persona mayor puede ser escaso, mantener una dieta de buena calidad es aún más importante. Una dieta de buena calidad para una persona mayor contiene cantidades suficientes de energía (como mínimo unas 1.500 kcal/día), así como abundantes minerales, vitaminas y proteínas.
Cuando está enferma, incluso una persona mayor en forma puede convertirse rápidamente en un paciente con riesgo de desnutrición secundaria. En las recomendaciones de atención nutricional (sólo en finés) se describe un modelo de atención nutricional multiprofesional.
Las personas mayores pueden experimentar una pérdida de peso involuntaria. La pérdida excesiva de peso es un factor de riesgo para la salud de las personas mayores. Para evitar estos riesgos, se puede aumentar la densidad energética y de nutrientes de los alimentos mediante elecciones sencillas, por ejemplo, seleccionando productos lácteos con mayor contenido en grasa.
Suplementos para aumentar el apetito en las personas mayores
A medida que envejece, es importante que siga comiendo bien. Los cambios en el organismo hacen que las necesidades de energía (calorías) sean menores. Por ello, es importante reducir el tamaño de las raciones si la actividad es escasa y disminuir los tentempiés azucarados, como pasteles y bollos.
La Guía Eatwell sirve para mostrar los diferentes tipos de alimentos que se consumen habitualmente y las proporciones que se recomiendan para conseguir una dieta sana y equilibrada. Ningún alimento por sí solo aporta todos los nutrientes que necesitamos, por lo que es importante incluir una amplia variedad de alimentos en la dieta.
Comer cinco o más raciones de fruta y verdura al día puede ayudar a prevenir las enfermedades del corazón y algunos tipos de cáncer. Las frutas y verduras están llenas de vitaminas, minerales y fibra, y tienen un bajo contenido en grasas.
Debes comer muchos alimentos ricos en almidón y fibra. Los alimentos con almidón, como el pan, el arroz, las patatas y la pasta, son una buena fuente de energía, fibra y vitaminas del grupo B, y deben utilizarse como base de las comidas.
Elija las variedades más ricas en fibra y las integrales, como la pasta de trigo integral, el arroz integral o simplemente deje la piel de las patatas. Además de ser bajas en grasa y altas en fibra, son buenas fuentes de otros nutrientes esenciales: proteínas, vitaminas y minerales.
Qué dar de comer a un enfermo sin apetito
La nutrición consiste en llevar una dieta sana y equilibrada para que el cuerpo reciba los nutrientes que necesita. Los nutrientes son sustancias presentes en los alimentos que nuestro cuerpo necesita para funcionar y crecer. Incluyen hidratos de carbono, grasas, proteínas, vitaminas, minerales y agua.
Una buena nutrición es importante, sea cual sea tu edad. Te da energía y puede ayudarte a controlar tu peso. También puede ayudar a prevenir algunas enfermedades, como la osteoporosis, la hipertensión arterial, las enfermedades cardíacas, la diabetes de tipo 2 y ciertos tipos de cáncer.
Pero a medida que envejece, su cuerpo y su vida cambian, y también lo hace lo que necesita para mantenerse sano. Por ejemplo, es posible que necesite menos calorías, pero aún así debe obtener suficientes nutrientes. Algunos adultos mayores necesitan más proteínas.
El mejor estimulante del apetito para las personas mayores
Durante los “años dorados”, una buena nutrición es tan importante como siempre. Sin embargo, muchos adultos mayores están desnutridos por diversas razones. Si usted o alguien a quien cuida tiene problemas para conseguir una nutrición adecuada, he aquí algunos consejos prácticos.
Aunque hay muchas razones por las que las personas mayores pueden estar desnutridas, también hay muchas formas prácticas de tratar el problema. Si usted o alguien a quien cuida sufre desnutrición o pérdida de peso involuntaria, el mejor primer paso es acudir al médico, que puede diagnosticar una enfermedad subyacente o modificar un régimen de medicación que pueda estar contribuyendo al problema. El médico también puede remitir a un dietista titulado, que puede diseñar un plan de alimentación personalizado. Además, hay algunos consejos cotidianos para prevenir la desnutrición en los adultos mayores:
Esto significa hacer que los alimentos ricos en nutrientes sean el centro de la comida. Por ejemplo, en lugar de un simple caldo de pollo, pruebe con una abundante sopa de pollo y verduras. Los guisos, los estofados y los asados también son buenas ideas para las comidas.