Cómo comer steak tartare
La salsa tártara fue bautizada por los franceses con el nombre de los tártaros de la estepa euroasiática, en la actual Rusia. Estos son los mismos tártaros que dieron nombre al steak tartare, y pueden haber sido los creadores de la hamburguesa. En realidad, la salsa tártara no es probablemente de origen tártaro porque requiere mayonesa, que probablemente se inventó en Europa, y se asocia con Mahón, un puerto clave en el Sitio de Menorca (1756).
Las recetas de la salsa tártara varían mucho. En su sinfonía de múltiples oberturas a la humilde salsa, el Instituto Paul Bocuse Gastronomique combina la mayonesa con cebollino y chalotas, y nada más. Larousse Gastronomique tiene la misma receta, pero sugiere que la yema de huevo de la mayonesa proceda de un huevo duro.
Ninguna de estas recetas se parece a la salsa tártara que los británicos disfrutan con el pescado y las patatas fritas. Nosotros buscamos trozos de sabroso schmoo en nuestra salsa tártara. Para conseguirlo, podemos dejar a un lado todas estas tonterías francesas y recurrir a Nick Nairn para que nos solucione el equilibrio correcto entre la mayonesa aceitosa y los pepinillos picantes. Sírvalo con pescados blancos delicados como el bacalao, el eglefino y el abadejo. Utilice la salsa verde con caballas y arenques más ricos.
Ingredientes del steak tartare
Tártarosтатарлар, tatarlarIntelectuales tártaros del Volga (de izq. a dcha.); delante: 1. Niyaz Muhammad Sulayman, 2. Hadi Maqsudi, 3. Umar Khalfa Davlatyar, 4. Abd al-Rahman Ahmar. Abd al-Rahman Ahmar; atrás: 5. Harith Fayzi, 6. Lufti Ishaqi (imán de San Petersburgo), 7. Ubayd Allah Bubi, 8. Yusuf AkcuraogluPoblación total: unos 7 millones[1].
El grupo más numeroso de los tártaros es, con diferencia, el de los tártaros del Volga, originarios de la región del Volga-Ural (Tatarstán y Bashkortostán), que por esta razón suelen ser conocidos también como “tártaros” en ruso. Constituyen el 53% de la población de Tartaristán. Su idioma se conoce como lengua tártara. Se calcula que en 2010 había 5,3 millones de tártaros en Rusia.
El idioma tártaro siberiano es independiente del tártaro del Volga-Ural. Los dialectos están bastante alejados del tártaro estándar y entre sí, lo que a menudo impide la comprensión mutua. La afirmación de que el tártaro siberiano forma parte de la lengua tártara moderna suele ser apoyada por los lingüistas de Kazán y denunciada por los tártaros siberianos[cita requerida].
Origen del tartar de atún
¡Gracias al Gran Khan por este sublime steak tartare! Sus jinetes nos dieron una receta que ayudó a extender su imperio a Asia y Europa y que finalmente conquistó la brisa de París en el siglo XX. A pesar de las pruebas, aún no está claro que los tártaros fueran los creadores de este fabuloso plato. Damos un paseo por su fascinante historia y le contamos las diferentes tesis sobre el origen de esta carne cruda y sabrosa que se considera precursora de la hamburguesa.
Si no ha probado un bocado, no lo dude. Pocos platos resumen el buen hacer de un chef como el steak tartar. Su aparente sencillez esconde una extrema dificultad a la hora de elaborarlo. Una elaboración que se ha perpetuado en la historia durante 800 años. Consiste en carne cruda de alta calidad, cebolla finamente picada, pimienta negra recién molida, salsa Wolcestershire y, como guarnición opcional, la yema de un huevo. Pero, ¿cómo hemos llegado a esta sofisticada receta? Viajemos a las estepas de Asia para entenderlo.
El tartar de ternera es francés
Sobre su origen, existen básicamente dos teorías, y en ambas la carne es su principal ingrediente. La primera hipótesis afirma que es un plato originario de Asia Central, donde la conocida tribu de los tártaros colocaba la carne entre la silla de montar y el lomo del caballo, para que se ablandara mientras cabalgaban. La otra teoría afirma que procede de la Polinesia francesa, donde es habitual consumir la carne cruda y se popularizó en los hoteles de origen francés a principios del siglo XX, época en la que el prestigioso chef Auguste Escoffier lleva a cabo una actualización de varias salsas, entre ellas la salsa tártara.
Es a principios del siglo XXI cuando los cocineros reinventan esta receta y comienzan a preparar el tartar con pescado y verduras, debido principalmente a la necesidad de innovación culinaria y a que la carne de vacuno cruda comienza a consumirse con precaución debido a la conocida enfermedad de las vacas locas.
En cuanto a las diferentes formas de tartar de pescado, las opciones habituales son el atún y el salmón donde se incorporan toques afrutados como el mango, la naranja o el aguacate. Algunos también añaden tomate y algún fruto seco como los piñones. También es frecuente sustituir la cebolla por la vinagreta, las alcaparras, etc.