Cómo arreglar la sopa de patata salada
La sopa puede estropearse fácilmente por un exceso de sal. Tanto si estás probando una nueva receta que no te ha salido bien, como si estás decepcionado por una sopa demasiado salada que has comprado, hay muchas formas de corregir el sabor. Puede ser tan sencillo como añadir más líquido, una pizca de vinagre o una cucharada de azúcar. O bien, puedes mezclar otra tanda de sopa sin sal para tener una tanda doble de sopa de sabor equilibrado. Prueba sobre la marcha y evita los ingredientes con demasiada sal cuando hagas una sopa casera para conseguir la mezcla perfecta.
Resumen del artículoPara arreglar una sopa salada, prueba a añadir un poco de vinagre, zumo de limón o vino a la sopa para que la acidez equilibre el sabor salado. También puedes diluir la sopa con agua, zumo o caldo para que no sepa tan salada. Si preparas una sopa abundante, prueba a añadir algo con almidón, como arroz, patatas o fideos, que absorberán parte de la sal. También puedes espolvorear unas cucharaditas de azúcar en la sopa para hacerla más dulce y menos salada. Para saber cómo evitar que la sopa sea demasiado salada, sigue leyendo.
Cómo hacer que la sopa de jamón sea menos salada
No hay nada peor que dar un gran bocado a una receta que, por lo demás, es perfecta, y que la boca se llene de sal. Puede ser el resultado de haber leído la medida de sal de la receta en cucharadas en lugar de en cucharaditas, o simplemente por haber sobrestimado lo que el autor de la receta quería decir con una “pizca” de sal. En cualquier caso, nos pasa a todos, incluso a Wolfgang Puck, o así nos lo hizo creer en su MasterClass. En una de las lecciones sobre cómo arreglar una sopa demasiado salada, el célebre chef aseguraba a los cocineros caseros que ninguna sopa está demasiado salada hasta el punto de no serlo.
Se puede pensar que la única solución es diluir el caldo con más agua y cruzar los dedos, pero resulta que una de las mejores soluciones es utilizar una patata. Como se explica en la MasterClass de Puck, basta con colocar una patata cruda y completamente pelada en la olla de la sopa, y dejarla reposar allí mientras la sopa sigue cocinándose. Sabrás que la patata está lista para ser retirada cuando haya absorbido el exceso de sal y no se haya cocinado del todo. Esto llevará unos 30 minutos.
Receta de sopa salada
Es innegable que los condimentos pueden realzar el sabor de los alimentos; de hecho, es increíble la diferencia que puede suponer una pizca de sal y un buen toque de pimienta. Pero, ¿qué ocurre si accidentalmente añades demasiada sal a tu sopa, guiso, curry o cazuela? No se preocupe, tenemos algunas formas sencillas de reducir la salinidad y salvar el plato.
El primer método consiste en añadir al plato trozos de patata cruda picada. La patata actúa como una esponja de sal y absorbe el exceso de sal. El almidón de la patata también ayuda a diluir la sal. Retira la patata después de 10-15 minutos y deséchala. ¿No tiene patatas a mano? Puedes hacer una simple masa de harina y agua, formar bolas y dejar caer 3-4 en tu plato. Deje que se cocinen durante 10 minutos y retire la masa antes de servir.
La dilución es otro método que funciona especialmente bien con sopas o caldos. Basta con añadir un poco más de agua o líquido para diluir el sabor salado. Si el agua no es suficiente, recurra a los sabores ácidos para equilibrar el plato. El zumo de limón o de lima o el vinagre son ácidos y atenúan el sabor de la sal. Añadir un componente cremoso o graso, como el yogur, la crema agria o la mantequilla (sin sal), también ayudará a reducir el sabor excesivamente salado del plato.
Sopa de tomate demasiado salada
Has añadido una o dos pizcas más o se te ha caído la tapa del salero, y ahora tu sopa está demasiado salada. Tirar toda la olla y pedir comida para llevar no es tu única opción. Por lo general, puedes arreglar tu comida cuando hay demasiada sal en ella.
Consejo Diluye, distrae tus papilas gustativas o añade un almidón para absorber la sal extra: todas estas son buenas soluciones cuando tienes una sopa demasiado salada. Sepa que los trucos para la sal pueden ayudar, pero no solucionarán todos los potajes demasiado salados.
Solución nº 1 para la sopa demasiado salada: dilúyela. La sopa puede saber demasiado salada cuando se reduce demasiado. Los sabores, incluyendo la sal, se concentran. Una solución fácil para esto es añadir más agua o un caldo sin sodio. Utiliza este truco si tu sopa es a base de caldo o clara. Las sopas cremosas pueden sufrir cambios de textura si se les añade agua.
Arreglo No. 2 para una sopa demasiado salada: Añada ácido. Si la sopa es ligeramente salada, añadir un chorrito de zumo de limón o vinagre ayuda a equilibrar los sabores. Añade sólo un chorrito o una cucharadita cada vez. El poder de fricción de estos ingredientes ácidos distrae tus papilas gustativas. A veces, una o dos pizcas de azúcar, además o en lugar del ácido, pueden reequilibrar los sabores de la sopa.