Comidas baratas para el embarazo
Comer bien y preparar un menú saludable cuando estás embarazada te ayudará a garantizar que tu bebé reciba los nutrientes adecuados para su crecimiento y desarrollo. Es importante que aprendas qué alimentos son los más beneficiosos para ti y para tu bebé y qué alimentos debes evitar cuando estás embarazada.
Aunque comas por dos, esto no significa que debas duplicar las raciones. Un menú diario saludable para una mujer embarazada incluye sólo unas 300 calorías más que una mujer que no está embarazada. En general, debes seguir una dieta completa y equilibrada, rica en proteínas y fibra y baja en azúcar. También debe comer alimentos ricos en grasas poliinsaturadas omega-3 y bajos en grasas trans y saturadas.
Las mujeres embarazadas deben tomarse muy en serio los consejos generales sobre alimentación saludable. Debe limitar los dulces (elija en su lugar frutas o zumos de frutas naturales), limitar las grasas (especialmente las saturadas); sin embargo, no debe eliminar las grasas por completo. También debe limitar o eliminar los alimentos fritos. Llevar una dieta variada y saludable que incluya verduras, frutas, cereales integrales y proteínas bajas en grasa es muy importante durante el embarazo. Asegúrate también de consumir al menos cuatro raciones de lácteos bajos en grasa (leche, yogur o queso bajos en grasa) al día para asegurarte de que obtienes tu calcio.
Comidas preparadas para el embarazo
Lo que comes es más importante que nunca cuando estás embarazada. Necesitas más vitaminas y minerales para ayudar a tu bebé a crecer y mantener tu propia salud. Y como tu cuerpo está trabajando duro para manteneros a los dos, necesitas consumir más calorías en el segundo y tercer trimestre.
Aunque puede ser tentador pensar que esas calorías extra son una luz verde para darse un capricho menos saludable, no te dirijas a la máquina expendedora todavía, dicen los expertos en nutrición. Si comes con regularidad de forma sana y equilibrada, un capricho de vez en cuando no te hará daño. Pero lo ideal es que la mayor parte de esas calorías extra provengan de alimentos nutritivos.
Si la mayoría de las veces picas cosas como postres, patatas fritas u otros alimentos menos saludables, piensa en qué es lo que hace que esa comida te resulte tan atractiva en este momento, e intenta conseguir esa misma calidad en algo que te aporte más nutrición.
Para favorecer el desarrollo del bebé, la mujer embarazada media necesita 340 calorías adicionales al día durante el segundo trimestre y 450 en el tercero. Eso equivale a una o dos meriendas. (Nota: la cantidad puede variar en función del peso previo al embarazo, el nivel de actividad y si vas a tener gemelos).
Postre para embarazadas
Come alimentos que tengan proteínas, como leche, queso, yogur, carne, pescado y legumbres. Los alimentos ricos en proteínas son importantes para ayudarte a recuperarte del parto y mantener tu cuerpo fuerte. Si tienes menos de 18 años o tenías un peso inferior al normal antes del embarazo, necesitas comer más proteínas.
Come fruta y verdura. Intenta que la mitad de tu plato sea de frutas y verduras. Las frutas y verduras tienen vitaminas y minerales que te mantienen sana. También tienen fibra, que ayuda a prevenir el estreñimiento. Asegúrate de lavar las frutas y verduras bajo el grifo de agua fría antes de comerlas.
Adelgace de forma segura. Habla con tu médico sobre cómo perder peso de forma segura después de que nazca tu bebé. Perder peso demasiado rápido puede afectar a la producción de leche materna. No tomes pastillas para adelgazar. Contienen fármacos nocivos que pueden pasar al bebé a través de la leche materna.
Toma vitaminas prenatales. Si estás dando el pecho, es conveniente que sigas tomando tus vitaminas prenatales. Tu médico puede recetarte estas pastillas para que tu seguro médico cubra una parte del coste.
Aperitivo para una mujer embarazada
Una dieta sana es una parte importante de un estilo de vida saludable en cualquier momento, pero especialmente vital si estás embarazada o planeando un embarazo. Una alimentación sana hace que te sientas bien y proporciona a tu bebé los nutrientes esenciales que necesita en el útero.
Intenta beber mucha agua todos los días: la mayor parte del agua de la ciudad contiene flúor, que ayuda a que los dientes de tu bebé en crecimiento desarrollen un esmalte fuerte. Algunos suministros de agua, como el agua de los depósitos, no tienen flúor.
Es probable que tengas más hambre de lo habitual, pero no es necesario que “comas por 2”, incluso si esperas gemelos o trillizos. Es más importante concentrarse en la calidad de los alimentos que ingieres que en la cantidad.
Comer de forma saludable suele significar simplemente cambiar las cantidades de los distintos alimentos que consumes para que tu dieta sea variada, en lugar de eliminar todos tus favoritos. Por ejemplo, si tomas un desayuno saludable todos los días, es más fácil evitar picar alimentos con alto contenido en grasa y azúcar.
Coma mucha fruta y verdura porque le aportan vitaminas y minerales, así como fibra, que ayuda a la digestión y evita el estreñimiento. Coma una variedad de frutas y verduras al día: pueden ser frescas, congeladas, enlatadas, secas o en zumo. Lávalas siempre con cuidado. Cocine las verduras ligeramente en un poco de agua, o cómalas crudas pero bien lavadas, para aprovechar los nutrientes que contienen.