Crema poblana
La primera vez que comí poblanos asados en salsa de crema (rajas de poblano con crema), fue en el buffet de desayuno de un resort en Ixtapa, México. Si te gustan los chiles poblanos, cocinarlos en una salsa de crema es una forma fabulosa de servirlos.
Las proteínas de la leche neutralizan las moléculas de capsaicina picante de los chiles. Por lo tanto, se obtiene menos de la picadura del chile y más del sabor real del mismo. Esto significa que podrás saborear mejor los maravillosos chiles poblanos asados si se bañan en una salsa cremosa.
La mayoría de las recetas que he encontrado en Internet para este plato tienen las tiras cortadas bastante finas, como de 1/2 pulgada de grosor más o menos. Pero en Ixtapa, donde conocí las rajas, los poblanos asados en crema, los chiles se cortaban en tiras gruesas, de una o dos pulgadas de ancho. Así es como los he reproducido aquí.
La información nutricional se ha calculado utilizando una base de datos de ingredientes y debe considerarse una estimación. En los casos en los que se dan varias alternativas de ingredientes, se calcula la nutrición del primero de ellos. No se incluyen las guarniciones ni los ingredientes opcionales.
Chile relleno
NutriciónCalorías: 346kcal | Carbohidratos: 8g | Proteínas: 16g | Grasas: 29g | Grasas saturadas: 18g | Colesterol: 80mg | Sodio: 477mg | Potasio: 315mg | Fibra: 2g | Azúcar: 5g | Vitamina A: 1229IU | Vitamina C: 97mg | Calcio: 468mg | Hierro: 1mg
Acerca de Maggie UnzuetaMaggie Unzueta es la escritora/blogger, fotógrafa, desarrolladora de recetas, videógrafa y creadora de In Mama Maggie’s Kitchen. Ella ha estado desarrollando comida mexicana fácil y auténtica, recetas inspiradas en México, y consejos de viaje desde 2010. Desde las recetas familiares hasta sus extensos viajes por todo México, lleva los sabores tradicionales mexicanos del sur de la frontera a tu cocina. Maggie ha aparecido en notables sitios web culinarios y otros medios de comunicación. Para más detalles, consulta su página Acerca de.
Recetas con chile poblano
Llamar a las rajas un plato versátil podría ser un eufemismo; estas tiras de chiles y cebolla en crema se convierten en un plato principal como relleno para tacos, hacen una sabrosa guarnición para carnes a la parrilla, funcionan como ingrediente de mezcla para huevos revueltos y similares, y, cuando se usan con moderación, sirven como condimento.
Los chiles poblanos, relativamente suaves, son la elección perfecta para un plato como éste, en el que el sabor de los chiles es más importante que su picor. Haga una tanda doble porque encontrará muchas maneras de disfrutar de las rajas una vez que las tenga a mano.
No utilice utensilios de cristal para hornear cuando se ase o cuando una receta pida que se añada líquido a una sartén caliente, ya que el cristal puede explotar. Aunque diga que es apto para el horno o resistente al calor, los productos de vidrio templado pueden romperse, y de hecho lo hacen, ocasionalmente.
Rajas con crema
1. Para asar los chiles en una estufa de gas: Encienda todos los quemadores a fuego alto y coloque 2 chiles poblanos en cada rejilla. Asar, usando pinzas para voltearlos ocasionalmente, hasta que todos los lados estén carbonizados, durante unos 4 minutos por lado. Para asar los chiles en el asador Coloca una rejilla en la posición superior y precalienta el asador a temperatura alta. Coloca los chiles poblanos en una bandeja y ásalos bajo el asador, dándoles la vuelta de vez en cuando, hasta que todos los lados estén carbonizados, de 2 a 4 minutos por lado. Para asar los chiles en una parrilla: Precaliente una parrilla de carbón o de gas a fuego alto. Coloque los chiles poblanos directamente sobre la rejilla. Asar, usando pinzas para darles la vuelta mientras se asan por todos los lados, durante unos 4 minutos por lado.
3. 3. Retire con cuidado los tallos, la cáscara y las semillas de cada chile (use guantes si los tiene; los chiles poblanos pueden ser picantes; no tenga la tentación de enjuagarlos con agua, pues les quitará todo el sabor). Corta los chiles a lo largo en tiras de ½ pulgada de ancho y aparta las rajas hasta que las vayas a usar.
4. En una sartén grande, preferiblemente de hierro fundido, a fuego medio, derrite la mantequilla. Agregue la cebolla, el ajo y la sal y cocine, revolviendo ocasionalmente, hasta que la cebolla esté ligeramente dorada, de 6 a 8 minutos.