Recetas para bebés
Hay muy pocas normas estrictas sobre la introducción de alimentos para bebés. Los expertos simplemente recomiendan dar al bebé un alimento nuevo cada tres días, vigilar de cerca los signos de reacción alérgica y evitar los riesgos de asfixia. Si no sabes qué dar de comer a tu pequeño, consulta estas 20 opciones sanas y seguras.
Los bebés comen con los ojos, igual que los adultos, y ¿qué hay más bonito que unas fresas de color rojo intenso o unos arándanos oscuros? Sirve bayas pequeñas o troceadas para comer con los dedos, o licúalas para obtener un delicioso puré que está tan bien untado en una tostada como en una cuchara.
Los cerebros en crecimiento de los bebés ansían el DHA, un ácido graso omega-3 esencial para el desarrollo cognitivo, y el salmón está repleto de él. Haz un puré con el pescado cocido y en escamas, o empanízalo y hornéalo para obtener nuggets de salmón.
La Academia Americana de Pediatría (AAP) ha recomendado recientemente que la introducción de los cacahuetes en los bebés entre los 4 y los 6 meses podría prevenir las alergias a los cacahuetes, especialmente si tienen un alto riesgo de desarrollarlas. En lugar de dar a tu bebé cacahuetes enteros o una cucharada de mantequilla de cacahuete (ambos peligros de asfixia), unta un poco de mantequilla de cacahuete en las tostadas o mezcla un poco en un puré.
Bebé comiendo sólidos 3 meses
Los niños pequeños necesitan suficientes alimentos nutritivos cada día para crecer sanos, fuertes e inteligentes. Alrededor de los 6 meses, tu bebé crece rápidamente y necesita más energía y nutrientes que en cualquier otro momento de su vida.
A los 6 meses, la leche materna sigue siendo una fuente vital de nutrición, pero no es suficiente por sí sola. Ahora tienes que introducir a tu bebé en la alimentación sólida, además de la leche materna, para satisfacer sus crecientes necesidades.
Cuando empieces a darle alimentos sólidos, ten mucho cuidado de que no se ponga enfermo. Cuando gatea y explora, los gérmenes pueden pasar de sus manos a su boca. Evita que tu bebé enferme lavando tus manos y las suyas con jabón antes de preparar la comida y antes de cada toma.
Cuando tu bebé tiene 6 meses, está aprendiendo a masticar. Sus primeros alimentos deben ser blandos para que sean fáciles de tragar, como las papillas o las frutas y verduras bien trituradas. ¿Sabías que cuando las papillas son demasiado acuosas, no tienen tantos nutrientes? Para que sean más nutritivas, cocínalas hasta que estén lo suficientemente espesas como para que no se escurran de la cuchara.
Directrices del Nhs para bebés
Has pasado los primeros seis meses de la vida de tu bebé asegurándote de que se alimente con leche materna o artificial. A medida que crece y se desarrolla, es posible que notes que tu pequeño retoño te muestra algunas señales de que está listo para pasar del biberón o el pecho a los alimentos sólidos. Si tu bebé puede sentarse y mantener la cabeza erguida, es una gran primera señal. Además, si se lleva objetos a la boca y muestra interés por lo que estás comiendo, tu curioso hijo podría estar listo para empezar a comer alimentos sólidos.
A los 6 meses, los bebés pueden empezar a masticar. Aunque todavía no domina esta habilidad, suele estar preparado para ensuciarse con algunas comidas blandas y en forma de puré, lo que le ayuda a conocer el sabor y la textura. A esta edad, el objetivo no es saciar al bebé con comidas completas de alimentos sólidos, sino despertar su curiosidad y entusiasmo por las opciones culinarias.
Dado que los bebés crecen tan deprisa, sus necesidades de hierro son elevadas para prevenir la carencia de este mineral y favorecer su salud general. Ofrézcale a su pequeño alimentos ricos en hierro, como cereales para bebés (evite los cereales de arroz), carne bien cocinada, aves de corral, puré de judías y lentejas. Para evitar que tu bebé se atragante, evita añadir sólidos como los cereales a los biberones.
Destete del bebé con tortilla
Si tu médico te da el visto bueno pero tu bebé parece frustrado o desinteresado por los alimentos sólidos, prueba a esperar unos días antes de volver a intentarlo. La leche materna y la leche de fórmula seguirán cubriendo las necesidades nutricionales mientras tu bebé aprende a comer alimentos sólidos. Pero a partir de los 6 meses, los bebés necesitan la nutrición adicional -como el hierro y el zinc- que proporcionan los alimentos sólidos.
Observa las señales de que tu hijo tiene hambre o está lleno. Responda a estas señales y deje que su hijo pare cuando esté lleno. Un niño que está lleno puede chupar con menos entusiasmo, dejar de hacerlo o rechazar el pecho o el biberón. Con los alimentos sólidos, puede apartarse, negarse a abrir la boca o escupir la comida.
Cuando tu bebé esté preparado y el médico te diga que puedes probar los alimentos sólidos, elige un momento del día en el que tu bebé no esté cansado o de mal humor. Lo que quieres es que tu bebé tenga un poco de hambre, pero no tanta como para estar molesto. Por eso, quizá quieras darle primero un poco de leche materna o de fórmula.
La mayoría de los primeros alimentos de los bebés son cereales infantiles enriquecidos con hierro y mezclados con leche materna o de fórmula. Coloca la cuchara cerca de los labios de tu bebé y deja que lo huela y lo pruebe. No te sorprendas si esta primera cucharada la rechaza. Espera un minuto y vuelve a intentarlo. La mayoría de los alimentos que se ofrecen al bebé a esta edad acabarán en su barbilla, babero o bandeja de la trona. De nuevo, esto es sólo una introducción.