Pescado para comer
Los pescados grasos son especies de peces con aceite (grasas) en los tejidos blandos y en la cavidad celómica que rodea el intestino. Sus filetes pueden contener hasta un 30% de aceite, aunque esta cifra varía tanto dentro de cada especie como entre ellas. Entre los ejemplos de pescado azul se encuentran pequeños peces forrajeros como las sardinas, el arenque y las anchoas, y otros peces pelágicos de mayor tamaño como el salmón, la trucha, el atún, el pez espada y la caballa[1].
El pescado azul puede contrastarse con el pescado blanco, que contiene aceite sólo en el hígado y en una cantidad mucho menor que el pescado azul. Ejemplos de pescado blanco son el bacalao, el eglefino y los peces planos. El pescado blanco suele ser un pez demersal que vive en el fondo marino o cerca de él, mientras que el pescado azul es pelágico y vive en la columna de agua, lejos del fondo.
La carne de pescado azul es una buena fuente de importantes vitaminas liposolubles, como la vitamina A y D, y es rica en ácidos grasos omega-3 (el pescado blanco también contiene estos nutrientes, pero en una concentración mucho menor). Por esta razón, el consumo de pescado azul en lugar de pescado blanco puede ser más beneficioso para los seres humanos, sobre todo en lo que respecta a las enfermedades del corazón, como el ictus y la cardiopatía isquémica;[2] sin embargo, se sabe que el pescado azul tiene niveles más altos de contaminantes (como el mercurio o las dioxinas o los COP) que el pescado blanco[cita requerida] Entre otros beneficios, los estudios sugieren que los ácidos grasos omega-3 del pescado azul pueden ayudar a mejorar las condiciones inflamatorias, como la artritis[3].
Cuánto pescado a la semana
Una ración son 3 onzas cocidas, o unos ¾ de taza de pescado en escamas. Los pescados grasos como las anchoas, el arenque, la caballa, el bacalao negro, el salmón, las sardinas, el atún rojo, el pescado blanco, la lubina rayada y la cobia tienen un alto contenido en ácidos grasos omega-3.
Algunos tipos de pescado contienen altos niveles de mercurio u otros contaminantes ambientales. Las mujeres embarazadas, las que planean quedarse embarazadas o las que están amamantando, así como los padres u otras personas que alimentan a niños pequeños, deben consultar este sitio web de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) para conocer las últimas advertencias para evitar el consumo de pescado contaminado.
Comer una variedad de pescado ayudará a minimizar cualquier efecto potencialmente adverso debido a los contaminantes ambientales. Los beneficios superan con creces los posibles riesgos cuando la cantidad de pescado que se consume está dentro de las recomendaciones establecidas por la FDA y la Agencia de Protección Ambiental.
Pescado sano
Probablemente ya sepa que debe comer pescado dos veces por semana. El pescado es una fuente de proteínas magras y saludables, y los tipos grasos, como el salmón, el atún y las sardinas, aportan esas grasas omega-3 saludables para el corazón y el cerebro que también deberías consumir en tu dieta. Pero también está la preocupación por elegir productos del mar que sean sostenibles. Saber qué marisco es mejor para la salud y el medio ambiente no siempre es fácil.
Afortunadamente, Seafood Watch, el programa dirigido por el Acuario de la Bahía de Monterey, ha combinado los datos de las principales organizaciones sanitarias y grupos ecologistas para elaborar “Super Green: Lo mejor de lo mejor”, su lista de productos del mar que son buenos para usted y para el medio ambiente. Para figurar en la lista, actualizada por última vez en enero de 2010, el pescado debe: tener bajos niveles de contaminantes -menos de 216 partes por billón [ppb] de mercurio y 11 ppb de PCB-; tener un alto contenido de grasas omega-3 que favorezcan la salud; y proceder de una pesquería sostenible.
Muchos atunes tienen un alto contenido de mercurio, pero el atún blanco -el tipo de atún blanco que se suele enlatar- obtiene la calificación de Súper Verde siempre que (y esto es lo decisivo) sea “capturado con caña o curricán” en Estados Unidos o en la Columbia Británica. La razón: Los peces más pequeños (por lo general de menos de 20 libras) y más jóvenes suelen ser capturados de esta manera (a diferencia de los peces más grandes capturados con palangre). Estos peces tienen índices de mercurio y contaminantes mucho más bajos y los que se capturan en aguas más frías del norte suelen tener un mayor contenido de omega-3. El reto: hay que hacer los deberes para saber cómo se ha capturado el pescado o buscar la etiqueta ecológica azul del Marine Stewardship Council (MSC).
La comida más sana del mundo
El pescado azul o rico en ácidos grasos se considera un alimento rico en proteínas y saludable que puede incluirse en una dieta equilibrada. El pescado azul tiene un alto contenido en ácidos grasos omega-3, un tipo de grasa buena para el cuerpo humano. Los alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 son importantes para la salud del cerebro y del corazón. Ayudan a reducir la inflamación y el riesgo de enfermedades cardíacas. Según la Asociación Americana del Corazón, los pescados grasos o ricos en ácidos grasos omega-3 deben ser consumidos al menos dos veces por semana.A continuación, algunas de las mejores variedades de pescado azul:1. SalmónHistorias relacionadasDía del Padre 2022: Lista de verificación de la salud para todos los padres mayores de 40 añosDía del Padre 2022: Aquí está su lista de verificación de la salud como un padre mayor de 40 años.¿Cómo desvanecer las cicatrices naturalmente? Esto es todo lo que necesitas saber¿Tus cicatrices están siendo obstinadas? Aquí es cómo acelerar su recuperación de la cicatriz.El salmón es rico en ácidos grasos omega-3 y se considera grande para ser incluido en su dieta. Es una gran fuente de proteínas y también es alto en vitaminas B esenciales. El salmón también puede incluirse en una dieta de pérdida de peso.