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¿Qué probióticos usar para queso vegano?

¿Qué probióticos usar para queso vegano?

Brie vegano

El queso vegano es una categoría de análogos de queso no lácteos y de origen vegetal. Los quesos veganos van desde los quesos frescos suaves hasta los quesos duros y cultivados que se pueden rallar, como el parmesano de origen vegetal. La característica que define al queso vegano es la exclusión de todos los productos animales[1].

El queso vegano puede elaborarse con componentes derivados de vegetales, como proteínas, grasas y leches (leches vegetales). También puede elaborarse con semillas, como el sésamo, el girasol, los frutos secos (anacardo, piñón, cacahuetes, almendra) y la soja; otros ingredientes son el aceite de coco, la levadura nutricional, la tapioca,[2] el arroz, las patatas y las especias[3].

Más tarde se elaboraron quesos veganos caseros con harina de soja, margarina y extracto de levadura. Con la margarina más dura se obtiene un queso vegano duro que se puede cortar; con la margarina más blanda se obtiene un queso más suave y untable[5].

El producto se comercializó alrededor de los años 70 u 80.[6] Estos productos iniciales eran de menor calidad que el queso lácteo o el queso vegano actual, con una textura cerosa, calcárea o plástica[6].

Queso crema fermentado vegano

1x2x3x InstruccionesNotas*Si no tienes acceso a la salmuera de chucrut, puedes utilizar otros fermentos. El sabor variará, pero igualmente funcionará: cualquier salmuera de verduras fermentadas sin pasteurizar funcionará, o los fermentos de kombucha funcionan bien o varios probióticos (en cápsulas o en polvo). Kulturedwellness también tiene excelentes fermentos, puedes utilizar su kéfir en lugar del agua en el paso 3.    De hecho, puedes fermentar los anacardos sin ningún tipo de iniciador, pero el resultado es mucho menos fiable.

Queso azul vegano

Si eres vegano o sin lácteos, probablemente el queso de anacardo o de nueces es algo que estás acostumbrado a comer regularmente. Como estamos haciendo el Reto Bikini Body y hemos estado compartiendo un montón de recetas saludables para ayudarte a desinflamar, hemos decidido convertir el clásico queso de anacardo en un queso desinflamatorio PROBIOTICO.

Para hacer este queso desblocante utilizamos miso, un condimento tradicional japonés que se produce al fermentar la soja con sal y un hongo llamado Koji. Al hacer queso o yogur vegano en casa, siempre es mejor utilizar alimentos probióticos enteros reales como el miso o el kéfir en lugar de pastillas probióticas. Son más eficaces, la mayoría de ellos existen desde hace siglos y son alimentos reales bien conocidos por sus increíbles beneficios para la salud.

Deja los anacardos en remojo toda la noche o al menos durante 4 horas. Enjuague y coloque los anacardos, el agua, el miso, la levadura nutricional, el zumo de limón y el ajo en un procesador de alimentos. Pulse repetidamente hasta obtener una pasta suave y espesa. Cubrir un colador con una gasa y transferir la crema de anacardos al colador. Envuélvela con la tela y coloca algo pesado encima para facilitar el drenaje. Dejar fermentar de 12 a 24 horas a temperatura ambiente.

Queso cheddar vegano

Vegan Milker de Chufamix no sólo puede hacer las más deliciosas leches caseras en 5 minutos, sino también yogures y quesos probióticos. Hay una receta muy útil que incluye un vídeo tutorial en el artículo llamado “yogur y queso vegano de anacardo”. Desde que descubrimos esta estupenda fórmula, hemos estado experimentando con un montón de semillas y frutos secos diferentes (girasol, nueces, soja, etc…), y, aunque algunas de las pruebas resultan completamente desastrosas, hemos conseguido algunas realmente sorprendentes. Nuestro último éxito ha sido este delicioso yogur de almendras probiótico y un queso de almendras para acompañarlo, ¡los dos están para chuparse los dedos! Aquí tienes la receta:

Tened en cuenta que debido a la falta de espesantes, se separará en la nevera y tendrá un aspecto un poco raro, como se ve en la foto. Esto no afecta a la calidad del yogur, así que dale un buen batido y ¡está listo para tomar! Como un “Actimel”, pero 100% natural. Un gran probiótico casero que además está delicioso.

Mezcla el queso con una cucharada de tahini, 1 cucharada de levadura nutricional, zumo de ¼ de limón, un poco de perejil picado y un diente de ajo picado. Puedes utilizar una batidora de mano, o mezclar a mano si lo prefieres.

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